Esta historia es 100 % real y me pasó a mí. Incluyo distintos documentos para demostrar cada afirmación.
En agosto de 2007 me disponía a pasar unos días de veraneo en Zaragoza. Para ir compré un vuelo de Iberia Vigo-Madrid y Madrid-Zaragoza.
El 9 de agosto llegué con tiempo al aeropuerto, volé a Madrid y me dispuse a esperar al enlace a Zaragoza. Poco antes de la hora de embarque cambiaron los paneles para indicar que acudiésemos a atención al cliente. Así lo hice y fue donde me informaron que el vuelo había sido cancelado y que estaban estudiando alternativas para llevarnos a nuestro destino. Lo primero era recuperar mi maleta facturada. Grande fue mi sorpresa cuando el empleado de Iberia me dijo que estaba en una de las cintas transportadoras de equipaje desde hacía un rato (15-20 minutos). Obviamente corrí a buscarla y ahí estaba dando vueltas. Tuve suerte de que no se la llevase nadie.