Junto con el Lumia 920, Nokia me prestó durante unos días un cargador inalámbrico y la verdad es que nunca había visto uno de cerca (mi primer contacto lo grabé en un vídeo que incluyo al final de este post) aunque ya en este artículo del año 2009 me parecía una idea muy buena.
El sistema no puede ser más sencillo de usar: se enchufa el cargador a la pared (en este caso el modelo Nokia Wireless Charging Stand) y no hay más que dejar el terminal encima y comienza a cargarse sin necesidad de conectar ningún cable.