La principal fuente de ingresos de Google sigue siendo la publicidad. Para la empresa de Mountain View es fundamental conocer los perfiles y gustos de cada uno de sus usuarios para poder presentarles los anuncios que más se adecúen a sus gustos y necesidades y, así, captar su atención e interés.
Google, hoy en día, ofrece muchos servicios (la mayoría gratuitos) que gozan de una gran popularidad como el buscador, Gmail, Google Maps, Google Earth, YouTube, Google+, Analytics, Android y Google Play, Blogger, Google Alerts, Google Drive, Google Docs, Google Calendar, Google Hangouts, Google Now, Google Chrome y un larguísimo etcétera). ¿Pueden sustentar todo esto solo con la publicidad y además ganar dinero? Parece que sí. ¿Por qué tantos?
A punto de cerrar el año quería hacer balance de la evolución del blog. A pesar de que lo hice público hace justo casi un año, el origen es muy anterior. De hecho llevo incluyendo en él los artículos que escribo desde el año 2002 siendo este el primero pero solo este año que termina me decidí, apoyado por familiares y amigos a los que doy las gracias, a ponerle una dirección web propia y una apariencia siempre mejorable.
El objetivo de esta página no es recoger ni mucho menos artículos de actualidad o noticias o novedades: para eso hay muchas y muy buenas webs y blogs, sino intentar aportar algo de información sobre temas que pueda ser útiles y ayudar en cuestiones tecnológicas en la medida de lo posible.
A continuación incluyo los 12 artículos más populares de este año y su razón de ser:
Google es una empresa con mucho poder y enormes ingresos de miles de millones de dólares. A pesar de que intentar diversificar su actividad, la realidad es que su principal fuente de ingresos es la publicidad.
Haciendo un poco de historia de Google, recordemos que inició su actividad como el buscador que todos conocemos, resultado de la tesis doctoral de sus fundadores. A raíz de ver la oportunidad de vender anuncios dependientes de las búsquedas comenzaron a desear conocer cada vez mejor qué es lo que le interesa al visitante para poder presentarle anuncios que merezcan su interés (lo que significará que hará click y quizá genere una venta y la comisión correspondiente en su caso). Para poder establecer este perfil por usuario invirtieron e invierten millones en desarrollos, comprar empresas como DoubleClick, etc. Su máxima aspiración es saber qué nos gusta y lo intentan averiguar sin descanso.
Si ha actualizado recientemente Windows (de manera manual o automática) seguramente tenga en su escritorio un icono llamado “Selección de Explorador” y, además, en alguna ocasión se le haya abierto una ventana (con un aspecto bastante “raro” por cierto) afirmando que un explorador es un elemento importante del sistema e invitándole a seleccionar uno de entre varias opciones.
A algunos usuarios esta pantalla les ha alertado y sobresaltado ya que en primera instancia tenía todo el aspecto de ser un virus o, al menos, un programa malicioso. Todo lo contrario.
A todos nos costó aprender cómo se escribía. Primero tuvimos que usar los favoritos pero poco a poco se hizo un hueco en nuestro vocabulario. Surgió como un buscador y al principio era casi mágico, parecía que leía el pensamiento.
En cuanto comenzó a recaudar dinero (incluso antes, pero sobre todo desde su espectacular salida a bolsa) empezó a extender sus raíces por muchos campos. Son raíces y no tentáculos porque no son nada agresivos y suelen ir “por debajo”, sin que se note. Revolucionaron el mundo con el correo electrónico con su toque personal, con su sistema de mapas (impresiona Street view), con su página de blogs y sobre todo con su sistema de búsquedas con la publicidad “inteligente”, es decir, presentan anuncios relacionados con lo que se está leyendo/buscando y que es su principal fuente de ingresos (y más servicios que no cito por cuestiones de espacio). Me estoy refiriendo a la cada vez más “goorda” Google.