Actualización de mayo de 2012: desde hace unos días circulan por Internet posts en los que se afirma que vuelve a funcionar el truco del punto en las respuestas. Lo he comprobado y, efectivamente, vuelve a ser operativo. Es decir, se puede volver a usar tal y como se hacía antes. Lo he probado en Hootsuite, Tweetbot, Twitter para iPhone y en la versión web (por si depende del cliente usado). En todos ellos al responder anteponiendo un punto (u otro elemento tal y como se describe en el artículo), el tuit puede ser visto por todos los seguidores. Es un auténtico mareo pero de nuevo tenemos esta opción.
Post original: Comparto este descubrimiento que hoy me ha dejado bastante descolocado…
Aunque usar Twitter es sencillo (no hay más que escribir un mensaje que quepa en 140 caracteres y enviarlo) tiene una serie de buenas prácticas, etiqueta y reglas de funcionamiento que conviene saber para poder manejarlo correctamente.
Veamos algunos conceptos básicos: Una mención es invocar a una persona en un tuit, y esto se hace anteponiendo la @ al nombre de la cuenta. Así por ejemplo en mi caso mi cuenta en Twitter es chdve y por tanto para mencionarme no hay más que escribir @chdve.
Es cada vez más habitual oír hablar de Twitter en la TV, radio, prensa, etc. (en las últimas semanas ha sido un tema estrella), además de verlo en anuncios, webs, etc. Pero… ¿en qué consiste Twitter? Es, en esencia, un servicio web gratis en el que se pueden escribir mensajes, de hasta 140 caracteres, que aparecen en el Timeline o historial de cada uno, sobre lo que se nos ocurra o nos interese. Esto podemos hacerlo a través de su página www.twitter.com o a través de aplicaciones específicas diseñadas para ordenadores y teléfonos móviles.
El pasado mes de septiembre tuvo lugar en España una convocatoria de huelga general. El objetivo de esta columna no es, ni mucho menos, comentar su motivación ni valorar sus resultados sino plantear algunas reflexiones.
En la era industrial una huelga de estas características podía llevar a detener prácticamente la actividad de un país si además los piquetes, más o menos violentos, recorrían las ciudades “animando” a no ir al trabajo. Todo cambia y hoy en día ya no es exactamente así. Ya no es posible paralizar totalmente un país. Las actividades a través de Internet no se detienen: por ejemplo las tiendas virtuales pueden seguir abiertas cuando las reales cierran la persiana por miedo a daños o a ser acusados de insolidarios con la causa, los vendedores que optan por trabajar pueden seguir contactando por teléfono o email con los clientes sin tener que desplazarse, etc. No recuerdo haber visto ese día ninguna página “cerrada por huelga”, ni siquiera los periódicos que no llegaron a salir en papel a la calle. De momento no existen los “ciberpiquetes”.